Capítulo 1
“ Eileen “ dijo la voz suave y dulce de mi madre mientras me tocaba con suavidad para que me levantara.
Sin embargo, no obtuvo respuesta, puesto que estaba demasiado cansada para responder.
Está bien. Me voy a presentar, porqué las historias tienen que empezar de una forma lógica. Me llamo Eileen Ninivée y tengo diecisiete años. Mi vida sería completamente normal si no me hubiera mudado a Turlock, ( una pequeña ciudad en California ) desde los Ángeles. Sí, sí. Como oyen. Desde los Ángeles. Y yo vivía muy bien allí. Tenía mi pandilla de amigos fieles, mis abuelos, mis tíos. Toda mi familia, vaya. No éramos de las familias que se van de vacaciones una o dos semanas. Y por eso es más difícil entender el porqué de nuestra mudanza. Todo empezó un día soleado, cuando mi padre regresó del trabajo. Nos dijo que le habían ascendido, y nosotras nos alegramos mucho por él. Con nosotras me refiero a mí y a mi madre, porque soy hija única. Lo que no me gustó tanto, y digo me, porque a mi madre le encanta Turlock, era mudarme. No quería mudarme. Estaba bien en mi antiguo instituto. Vivía bien. No era la reina del instituto pero tampoco era la pringada con gafas y aparatos de la que todos se apartan como si tuviera la peste. Era de clase intermedia. Y me enorgullecía de ello. Ser de clase intermedia es fantástico. No tienes que preocuparte por organizar bailes ni fiestas, pero tampoco tienes que preocuparte por qué no te inviten. Ya lo sabéis, lo mejor es ser de clase intermedia. No era la líder del instituto, pero sí lo era de mi reducido grupito de amigas. En los Ángeles tenía muchas amigas, también amigos, no me malinterpretéis, pero sobretodo amigas, porque a esta edad los tíos solo te hablan si quieren acostarse contigo. Si, es muy triste, pero es así. Mis mejores amigas se llaman Davinia, Antje y Elein. Las quiero mucho, y aunque ya no vivamos en el mismo sitio las seguiré queriendo, y las voy a llamar muy a menudo. Claro que voy a hacer muchos amigos aquí también. Lo tengo todo decidido. Se me da muy bien hacer planes, y normalmente salen bien. ( La mayoría ) No tengo problemas para hacer amigos porque no soy nada tímida, pero a veces abro demasiado mi gran bocaza. Me encanta hablar, y hablar. Como estoy haciendo ahora. Voy a resumir un poco para poder seguir con la historia. Estoy triste por haberme ido de los Ángeles, pero estoy contenta de poder empezar una nueva vida sin que nadie me conozca, porqué no me podrán juzgar sin conocerme. De momento nos hemos instalado tan bien como hemos sabido, ya que llegamos ayer por la tarde. La casa es preciosa, mucho más bonita que la que compartíamos con los abuelos en los Ángeles. Mi habitación es enorme, y tengo teléfono, ordenador y televisión allí. Es fantástico. Perfecto, diría yo. La casa tiene un jardín enorme, y adivinad, una piscina. En la ciudad se respira un aire mejor que en mi antigua ciudad. Todos disfrutamos mucho explorando la nueva casa, menos mi padre, porque se tuvo que ir ayer al trabajo, y algo me dice que ya se ha ido hoy también. Los altos cargos estresan mucho. Pero bueno, ya me he alargado suficiente por ahora. Dejaré que el tiempo os aclare las dudas que podáis tener en estos momentos.
“ Eileen “ sigue insistiendo mi madre, cada vez mas histérica. Se pone histérica por todo, debido al miedo que tiene de la muerte, pero yo no estoy muerta, estoy respirando.
Lentamente abro los ojos.
“ Que quieres mamá, no ves que estoy intentando dormir “ le digo con cara de sueño.
“ Me alegro de que tengas sueño cariño, pero tienes arreglarte para ir al instituto si no quieres llegar tarde “ me dice con fingida paciencia.
“ ¿Instituto? “ De repente me viene a la mente que hoy es lunes. “ ¡EL INSTITUTO!
Me levanto tan rápido que me vuelvo a caer en la cama con una exclamación en mi boca. Lo vuelvo a intentar y esta vez consigo mantenerme de pie. Pero no sin un leve tambaleo antes.
“ ¿Mamá, que hora es? “ le digo intentando parecer tranquila.
“ Tranquilízate, cariño. Son las ocho de la mañana. “ me dice percibiendo mi tono demasiado tranquilo que uso cuando estoy al borde de la explosión.
“ Ah, entonces es temprano “ digo mucho más tranquila.
“ Cariño, sé que es temprano, pero yo si fuera tu intentaría dar una buena impresión y llegar antes que nadie el primer día de instituto “ dice mamá.
“ No creo que llegar antes que todo el mundo me haga dar buena impresión. Más bien me hará parecer freaky de remate “. Digo volviendo a acostarme a la cama, dándome cuenta de que el susto me ha hecho pasar todo el sueño.
“ Oh, vamos, cariño. Basta de preocuparte por ser o no ser rara. Tú eres perfecta, tienes una belleza natural, y a demás eres muy simpática i extrovertida. Ya verás que la semana que sigue te sentirás como pez en el agua. “
“ Mamá, tú crees que soy perfecta porqué es tu obligación. Aunque fuera gorda y fea me dirías que soy la chica más bella del mundo. No mientes nada bien. “
“ Eso es mentira. Yo te digo la verdad, pero tú solo escuchas lo que quieres. Tienes el desayuno preparado sobre la mesa. Yo me voy a trabajar, adiós cariño. Y recuerda, tú eres la estrella más brillante del cielo. “ dice orgullosa.
“ Recuerdo que me decías esto cuando tenía diez años, y ya entonces no me lo tragaba. Que te vaya bien. “ le digo entre suspiros de resignación. Con mi madre no se puede hablar, ya que ella siempre me trata como a una niña de diez.
“ Adiós, cielo. “ dice regalándome una de sus felices sonrisas que debían conquistar a los hombres cuando tenía mi edad.
Mi madre es realmente hermosa. Teniendo en cuenta que es bastante mayor. Tiene unos ojos verdes jade y el pelo negro como el ala de un cuervo. Tiene un cuerpo esbelto y atlético. Yo tampoco estoy nada mal. Me parezco a la típica barbie de los sueños de una niña, sólo que yo no me encuentro nada bella. Con mis ojos azules y pelo rubio no tengo toda la apuesta ganada. Tengo unas cuantas curvas, sí, y también soy alta, pero se me dan muy mal los deportes, porque soy muy patosa. Me tropiezo con todo lo que está en el suelo menos con mis pies, y a veces hasta con ellos me tropiezo. Es penoso, pero no se le puede hacer nada. El patosismo es una forma muy eficaz de alejar a los chicos de ti. En mi vida solo he tenido seis novios. Dos de ellos cuando era pequeña y jugábamos a ser novios, pero también me gusta contarlos. Tres más cuando entré en el instituto. Mejor no hablar de estos tres porqué no acabé muy bien con ellos. El último y el más difícil de superar, fue el año pasado. Yo lo amaba de verdad, y me enteré que había estado saliendo conmigo por una apuesta. Me dejó y se burló de mi durante mucho tiempo por haber sido tan estúpida de creer que estaba enamorada de mí. Desde entonces he tachado a los novios de mi agenda de cosas por conseguir, porque estoy harta de que me hagan daño, porque siempre lo hacen. Y cuando digo siempre, es siempre.
Me levanto de la cama y me voy directamente a mi grandioso armario. Me encanta mi ropa. De hecho, me encanta toda la ropa del mundo. Toda menos la del mercado, claro. Le doy mucha importancia a la forma de vestir, porque la manera de la que vistes dice mucho de cómo eres. Voy a elegir algo bonito para hoy. Mi madre no iba tan desencaminada sobre lo de dar buena impresión. Quiero ser la estrella más brillante, pero está claro que no voy a poder serlo. Elijo al azar unas botas Prada y una camiseta D&G. Los pantalones son siempre fieles a Dior. Gafas de sol Gucci. Después de esta selección de ropa os debéis estar imaginando a una pija dentro de mí, pero no es así. Esta es la mejor ropa que tengo, y la más perfecta para todas las ocasiones importantes. Después de vestirme toca una buena ración de maquillaje. Viva al maquillaje, que hace milagros. Mi apariencia es perfecta. ¡Viva!
Después de vestirme voy directa al desayuno, que devoro con avidez. Cuando estoy a punto de terminar, el teléfono me sorprende con una llamada inesperada.
“ Ring, ring, ring “.
Cojo el teléfono, y con emoción contenida por descubrir la persona culpable de mi primer llamada telefónica digo:
“ ¿Si? ¿Quién es?
“ ¡Eilyyyy! “
“ ¿Davinia? “
“ ¡Siii! Soy yo. ¿Cómo estas? “
“ Pues la verdad me iba al instituto cuando he recibido tu llamada “ digo con fingido aburrimiento.
“ Ahh. Te he echo mucho de menos, Eily… Todas te echamos de menos. “ dice afligida.
“ No te pongas sentimental Davi, porque no tienes derecho. Sabes que yo os echo mucho mas de menos que vosotras “ digo a punto de llorar. “ Todo es demasiado perfecto para mi, y me gustaría compartir esta perfección con vosotras. “
“ ¿Es bonita la casa? “
“ Preciosa. Me encanta, y tengo televión, ordenador y teléfono en mi habitación. “
“ Waaww “ suelta Davinia. “ Me parece que te lo pasas muy bien aquí, chica. “
“ Pero sin vosotras no es lo mismo Davi. No conozco a nadie aún. “
“ Tonterías, ya veras como hoy mismo cuando llegues al instituto vas a conocer a alguien. Hablando de instituto, yo también me tengo que ir, porque Elein acaba de llegar. “
“ Está bien, “ le digo fingiendo estar muy pero muy triste. ( Estoy triste, pero lo puedo superar ) “ dale recuerdos a Elein de mi parte, y también a Antje. Diles que las quiero mucho y que cuando vuelva del instituto les haré una llamada a cuatro bandas pagando yo “
“Ohh,” dice Davinia “ creo que les va a encantar, sobre todo si eres tú la que paga… “ ya a punto de reír.
“ Ja, ja, ja. Creo que tienes razón. Bueno Davi, me ha gustado mucho hablar contigo, me has dado fuerzas para enfrentar mi primer día en el infierno. “
“ Infierno suena muy mal, pero tú no irás al infierno, sino al purgatorio, jajaja. Antes de colgar tengo que asegurarme de que llevas tu ropa preferida. “
“ No te preocupes por eso Davi, llevo la ropa adecuada, y estoy lista para arrasar. “
“ Así me gusta. Adiós Eily, te quiero mucho. “
“ Adiós “ digo yo, pero Davinia ya ha cortado.
Vamos Eily, pienso por dentro. Tú puedes hacerlo. Dicho esto me voy al garaje a por mi Mini del techo de cuadros. Me enamoré de ese coche des de que lo vi, y como casi todo lo que quiero, fue mío. Llaves en el contacto, ¡vamos al instituto! Me habían indicado la dirección del instituto cuando llegué, pero aún no lo había podido ver con mis propios ojos. El Turlock High School es un instituto corriente. Con vallas alrededor. Algún que otro bosque, patio enorme, piscina cubierta, campo de tenis, … También había estas cosas en mi interior instituto. No sé porque, pero me he decepcionado un poco. Esperaba algo más espectacular. Algo que correspondiera más al nombre Turlock High School. Me recuerda a un nombre de castillo. No sé porque motivo, pero así es. Y en lugar de un precioso castillo me encuentro con un aburrido instituto normal y corriente. Desmoralización. No. Inspira, expira, inspira, expira. Mucho mejor. Aparco mi Mini en el aparcamiento del instituto. Al menos tienen aparcamiento, pienso. Esto ya es mucho, porque no me gusta aparcar el coche diez calles lejos del instituto i tener que ir andando. Puag. A demás con mis Prada preferidas no me quiero arriesgar. Salgo del coche con fingido aire de suficiencia, porque la verdad estoy demasiado nerviosa para sentirme superior. Nunca se me ha dado bien sentirme superior, porque en realidad yo creo que soy igual que todas las otras chicas. Ni mejor ni peor. Exactamente igual.
Voy a ver a la secretaria para conseguir mi nuevo horario de clases. Es una mujer muy amable que me mira con alegría cuando entro. No debe tener mucho trabajo, pienso al ver su cara de excitación.
“ Hola, señora. “ le digo con una sonrisa pintada en la cara, porque estoy muy nerviosa.
“ Hola, Eileen. ¿Por qué tu eres Eileen, verdad? “ cuando dice esto último su cara a adquirido un tono rosado por la equivocación de llamarme por mi nombre antes de que yo se lo haya dicho, lo que me hace pensar que la pobre mujer no tiene demasiada faena y se tira las tardes leyendo historiales de alumnos, sobretodo los de alumnos nuevos.
“ Sí. Ese es mi nombre. Encantada de conocerla, señora ¿…? “ Ahora he caído en que no tiene una placa con su nombre. Qué extraño. O a lo mejor no lo es aquí.
“ Ebba Gilly. Pero llamame Ebba, por favor “
“ Claro, claro. “ le digo mientras le estrecho la mano.
“ Aquí tienes tus horarios y todo lo que necesitas para orientarte en este sitio. Los primeros días te va a resultar difícil, pero te vas a acostumbrar, ya lo verás. “
“ Eso espero. “ le digo mostrando mi nerviosismo porque ya no lo puedo aguantar.
“ Tranquila bonita. Las niñas como tú no tienen problemas para encajar en sitios como este “ me dice mostrándome una gran sonrisa.
“ Gracias. “ De verdad estoy más tranquila, no sé porque, pero estoy mucho más tranquila.
Me alejo de la secretaria andando con normalidad. A lo lejos veo el tablón de anuncios. Sana curiosidad me lleva a ver lo que hay escrito. Bailes, concursos,… lo que siempre hay en los tablones de anuncios. Pura basura. Estoy leyendo información sobre el baile cuando una voz procedente de mi espalda me da un susto de muerte.
“ ¡Hola! “ dice alguien.
Me giro para ver quién es. Me quedo helada. Es un chico, y estúpidamente guapo. Ojos verdes claro, pelo castaño, cuerpo musculoso. Me derretiría si estuviera hecha de helado en vez de huesos.
Responde algo, pienso. Algo inteligente que solo tú podrías decir. No soy inteligente, pienso. ¡Mi nota máxima es un notable! Para las frases originales necesitaría tener a Antje conmigo… Ella es la intelectual, no yo. No tengo mucha imaginación, nunca la he tenido, y por eso me gusta tanto ver la tele, porque me proporciona la imaginación que no tengo, pero ahora no recuerdo ninguna frase inteligente que haya oído en alguna serie. Vamos, rápido, responde, pienso.
El chico aún sigue mirando con una sonrisa, esperando ser contestado.
“ Hola “ digo.
Que original eres Eileen, pienso, maldiciendo mi estupidez por dentro.
“ Me llamo Evan, Evan Labarrere, y tú debes de ser la nueva. Eileen Ninivée. “ dice con esa sonrisa tan seductora y atractiva que me tiene atrapada y casi me deja sin palabras.
“ Sí. Yo soy Eileen. Encantada de conocerte Evan. ¿Por qué motivo todos conocéis mi nombre aquí? Que yo recuerde no soy famosa y tampoco he salido por la televisión, y Eileen no es un nombre corriente. “ digo cada vez mas sorprendida.
“ No, definitivamente no has salido por la televisión, jaja, pero aquí en el Turlock High School somos pocos alumnos, y un nuevo siempre llama muchísimo la atención. Sobretodo si es una chica tan bella y hermosa como tú. “
“ Ah, bueno, en ese caso. Emm. Sii. Gracias. Me tendría que ir ya a mi clase si no quiero llegar tarde.. “ digo comiéndome palabras porque el color ha subido a mi cara por los cumplidos, y me temo que pronto voy a dejar de hablar coherentemente si no me marcho del lado de este chico.
“ Ja, ja, ja. No te preocupes, no voy a decir más cumplidos, porque me he dado cuenta de que te incomoda. Pero me da pena que no sepas lo guapa que eres, y por eso creo que es mi deber recordártelo “ me dice con una mirada divertida y una sonrisa perfecta de modelo de televisión que hace sentir más bien que nunca.
“ Umm. Creo que podré soportar tus cumplidos. “ le digo ya más tranquila, pero aún con la mirada fija en sus enormes ojos verdes.
“ Eso está por ver. “ Otra vez con la sonrisa picarona. “ ¿Qué clase te toca ahora, preciosa?”
“ Literatura “ le digo con un suspiro. “ Pero la verdad es que no sé muy bien donde está. Ya sabes eso de que las mujeres no se aclaran con los mapas, pues bien, yo no soy la excepción. Me oriento fatal. “
“ No te preocupes Eileen, yo te voy a llevar a la clase donde se da literatura, porque también me toca a mí esa clase. “ me dice. Su encanto natural es tan grande que me pregunto si las profesoras también se sienten atraídas hacia él.
Entonces de golpe, se pone a reír como un loco.
“ ¿Qué pasa? “ le pregunto algo enfadada.
“ Nada, nada, es que estaba recordando un chiste que me han contado antes de entrar… Por cierto, Eileen, ¿quieres que te presente a la gente guapa de este sitio? “
“ Claro. Me encantaría, puesto que no conozco a nadie aún. “ Por dentro estoy irradiando de felicidad, pero también me molesta que me llame Eileen cuando todo el mundo, hasta mi padre, me llama Eily. Eily es mucho más corto, más original y más bonito que Eileen. Eily es sencillamente perfecto, pero él me llama Eileen, y solo me llaman Eileen cuando me sermonean.
“ Por cierto, Eileen, ¿te importa que te llame Eily? “ me dice mirando con curiosidad.
“ ¡No, claro que no! En realidad quería pedirte que lo hicieras, pero te me has adelantado. “ Que feliz soy, pienso. Este chico es la cosa más perfecta que existe, se parece a un dios.
“ Eily, vamos, porque si no llegaremos tarde de verdad “
“ ¡Sí! ¡Espérame Evan “ le digo gritando, porque él ya está en la otra punta del pasillo.
“ Atrápame si puedes “ me dice lanzando una de sus miradas pícaras que me hace derretirme.
“ ¡Voy! “ le suelto.
Empezamos a correr por los pasillos hasta que me empiezo a cansar y voy aminorando la marcha, y Evan se para y viene a mi lado.
“ ¿Estas cansada? “ dice burlándose de mí. “ Sólo ha sido un paseíto, ¿que vas a hacer cuando corramos diez kilómetros en la clase de gimnasia?
Me detengo en seco y lo miro con los ojos fuera de las orbitas. “ ¿Dieeez kilómetros? ¿Estáis todos locos aquí o es solo mi impresión? “ Sentía que iba a marearme. Diez kilómetros. Imposible para mí. Si con dos kilómetros se me salía el corazón por la boca, con diez ya me veía ingresada en el hospital por taquicardia. Me iba a desmayar allí mismo cuando sentí una mano en mi espalda, y al girarme vi a Evan riéndose a carcajadas.
“ ¡Es una broma Eily! ¡En este instituto no corremos ni un kilómetro! Por un momento me he pensado que te desmayarías aquí mismo. ¿Tranquilízate, quieres? Solo era una pequeña bromita. “
“ Eres malo. “ le digo fingiendo estar enfadada. Luego me pongo a reír sin parar, y él me sigue con su risa melódica.
“ Princesa, ya hemos llegado. Aquí está la clase de literatura. “ me dice haciendo una reverencia que provoca una risa por mi parte.
“ Gracias por acompañarme, Evan. Te lo agradezco mucho, de verdad. “
“ No ha sido nada, hermosura. A demás yo también tenía que venir a esta clase. Después literatura te voy a venir a recoger para ir a almorzar, y también te presentare a toda la pandilla. “
“ Claro. “ le digo obsequiándolo con mi mejor sonrisa.
Después entro en la habitación y me pongo delante del profesor, que rápidamente me reconoce como la alumna nueva. Antes de que el profesor diga algo consigo ver como Evan se sienta en su mesa, y me lanza una enorme sonrisa mal disimulada. Está sentado al lado de una chica preciosa. Rubia y de ojos marrones. Cintura pequeña y altura media. Es preciosa y no deja de mirar a Evan, pero él no parece prestarle atención. Pobre chica. No entiendo como Evan se puede fijar en mi teniendo a esa muchacha tan bonita a su lado.
Segundos después ya solo puedo pensar en el profesor y en responder las preguntas que me hace.
“ Hola. Tú debes de ser Eileen Ninivée. Yo soy el profesor Owen. Doy la asignatura de literatura. “ dice, y luego se queda mirándome para que responda cualquier cosa.
“ Sí. Yo soy Eily. “ Bien, eres estúpida de remate. ¿Yo soy Eily? ¿Yo soy Eily? Que frase tan estúpida, ¿Por qué no puedo ser un poquillo más inteligente? Me maldigo a mi misma.
Entonces oigo una risita y me giro para fulminar al culpable de ese sonido. Es Evan y se está riendo de mi, pero no me puedo enfadar con él, porque también me pongo a reír.
“ Señor Labarrere “ dice el prof. Owen. “ ¿tiene algún problema o desea compartir algún hecho gracioso con la clase? Porque yo me imagino que es difícil para la señorita Eileen venir nueva des de otro lugar y estar delante de todos ustedes chicos maleducados y que encima se rían de ella en sus propias narices.
“ No pasa nada “ le digo al prof. Owen. “ No importa. “
“ Todas las chicas que se cruzan con este individuo dicen lo mismo. ¿Por qué será? Creía que usted sería más lista, señorita Ninivée, y se mantendría alejada de ese chico que nada bueno ofrece.”
“ Está hiriendo mi orgullo, profesor Owen. “ dice Evan riéndose aún.
“ ¿Qué orgullo, señor Labarrere? “ dice riéndose también.
“ Tiene usted razón. “
La clase siguió riendo hasta que el profesor Owen se dio cuenta de que me habían apartado de la conversación, y volvió a ponerse serio.
“ Señorita Eileen. Ya ha podido ver que esta clase está muy unida, y va a aceptarla tal y como usted se merece. Bienvenida a nuestro humilde instituto. “
“ Muchas gracias. “ digo con una sonrisa radiante como un día de verano.
Luego, lentamente, me giro para inspeccionar todas las caras de la clase. Chicos y chicas por igual. Esto va a estar bien, pienso.
“ Ahora, Eileen, agradecería que te sentaras en cualquier lugar vació que encuentres, porque la clase ya se está retrasando demasiado “ dice el prof. Owen ya volviendo a estar serio.
“ Claro. “ digo.
Inspecciono la clase nuevamente, pero esta vez para encontrar un asiento vació. Oigo a Evan diciendo a su compañera que me deje sentar en su sitio, y también la mirada envenenada y la negación que le ofrece la chico. Paseo mi mirada por la clase y veo un asiento vacío en el fondo. Un chico. Ojos marrones, pelo negro, musculoso, y perfecto igual que Evan. Con toda la determinación que tengo me dirijo a la mesa de su lado, y cuando me siento él me dedica una sonrisa de felicidad extrema. Me derrite igual que la sonrisa de Evan.
El profesor Owen empieza a dar la clase, pero yo no puedo concentrarme. No veo a Evan desde mi mesa, porque lo tapa una chica alta como una jirafa, y entonces reparo en que el chico de mi lado me está mirando. Me sonríe, yo me sonrojo, y miro abajo. Soy muy tonta, y me sonrojo por cualquier estupidez, pienso.
El chico se ríe y me mira otra vez.
¿Por qué se está riendo? Pienso yo. ¿Por qué en este instituto los chicos guapos se ríen sin motivo?
Más risas por parte del chico nuevo.
No me gusta que la gente se ría de cosas que no alcanzo a ver, me digo a mi misma, y al volverme a girar el chico ya no está riéndose. En lugar de reír me señala un punto encima de mi mesa. Una nota, pienso.
La abro discretamente, y veo en ella una letra perfecta que dice:
Hola, Eily.
Me llamo Kyle Hizo, y estoy encantado de conocerte. Te envío esta nota para que el señor Owen no nos pille hablando. Lo entenderás cuando lo conozcas. Tiene la oída más fina del mundo el hombre. Me gusta que te sientes a mi lado, porque yo soy una muy buena influencia. J ajaja. Te escribo principalmente para conocerte y para que me conozcas, pero también lo hago porque quiero pedirte disculpas por reírme de ti antes. No lo he hecho con mala intención, tan solo me ha hecho gracia la cara que has puesto cuando te has sentado a mi lado. Eso es todo. Espero que no estés enfadada conmigo por haberme reído de ti.
P.S. Ya sé que Evan te ha invitado a almorzar en nuestra mesa. Te advierto de que él es una mala influencia, todo el contrario que yo, pero ya me está bien que te haya invitado, porque así nos conoceremos mejor.
Kyle:)
Antes de doblar la nota de Kyle, y devolvérsela escribo:
Muchas gracias por la disculpa, Kyle. La acepto. Tienes razón, yo siempre pongo caras raras cuando estoy nerviosa o excitada. ¿De verdad Evan es una mala influencia y tu eres el santo del cielo? Eso está por ver. Nos vemos después de clase.
Eiily:D
Después de esa nota ya no trato de concentrarme, porque sé que no es posible. Dos chicos guapísimos han hablado conmigo el primer día de instituto. Las cosas no podrían ir mejor. Soy tan feliz.
Por suerte la clase pasa sin problemas, porque el profesor Owen resulta ser bueno y me deja respirar en mi primera clase.
Recojo mis cosas y me dispongo a salir cuando Evan y Kyle me llaman. Me acerco a ellos con una gran sonrisa en mi cara.
“ ¡Hola chicos! “
“ ¡Vaya, Eily, me parece que te está hiendo todo bastante bien! “ me dice Evan entre risas.
“ Claro que sí, porque cuando ha visto mi hermoso rostro se ha enamorado de mi perdidamente, y ahora solo puede pensar en él “ dice Kyle intentando en vano ser serio.
“ Más te gustaría Kyle, yo la he visto primero. Jajaja “ dice Evan aún sonriendo.
“ Chicos, “ les digo también riendo. “ me encanta charlar con los dos, pero es evidente que tengo hambre y no quiero pasar todo el día hablando aquí en medio del pasillo”
“ Tienes razón, perdónanos por nuestra estupidez, Eily “ dicen los dos a la vez.
“ ¡Por aquí chicos! “ gritan cuatro chicas guapísimas des del otro lado del pasillo.
“ Ya vamos, ya vamos “ musita Evan tranquilamente.
Nos acercamos a la chicas, que se quedan con una cara de sorpresa al ver que yo acompaño a Evan y Kyle.
“ Eily, estas son Britanny, Angela, Adeline y Adrienne. Las reinas del instituto, y también las más bellas “ dice Evan con su sonrisa de dientes-muy-pero-muy-perfectos.
Las chicas, que parecían sorprendidas, hasta enfadadas al ver que yo estaba con Kyle y Evan, parecían haberlo olvidado ya, porque me hablaron con falsa amabilidad y se presentaron debidamente.
“ Yo soy Britanny, pero llámame Brit, por favor. “ dice la chica que estaba sentada al lado de Evan en literatura. Ella parece ser la reina del instituto. Las otras son sus arpías, pienso yo.
“ Encantada de conocerte, Brit. “ le digo tendiéndole una mano que ella rechaza con una falsa sonrisa. No creáis que tengo una paranoia sobre las falsas sonrisas e intenciones de la gente, porque yo tengo esa habilidad especial para descubrir las verdaderas intenciones de la gente.
“ Angy “ se presenta una chica pelirroja con pecas en la cara y con unos ojos color café saltarines, y de muy baja estatura.
“ Encantada “ le digo ya sin tenderle la mano porque creo que a las populares no les gusta el contacto con las no populares.
“ Adeline “ dice entre dientes una chica que parece tímida, pero que en realidad está nerviosa, de ojos verdes y marrones, pelo rojizo y muy alta. Es la jirafa que me impedía ver a Evan en la clase, pienso. ¿Pero porque estará nerviosa esta chica? ¿Cree que la voy a morder o algo?
De repente, me decepcionan las risas que salen de las bocas de todos los allí presentes. Evan,Kyle,Brit,Angy,Adeline y Adrienne se están riendo a pata suelta de mi. Que la gente se ría de mí cada vez me incomoda más, y parece que es costumbre hacer eso en este sitio, porque todo el mundo lo hace.
Al darse cuenta de mi situación incómoda, Adrienne interviene con su presentación.
“ Hola, yo me llamo Adrienne, pero mis amigos me llaman Adri. “ Cuando habla, todas las chicas que aún seguían riendo, se paran en seco. Ella es la reina del instituto, y yo estaba equivocada desde el principio. Brit es una de sus harpías.
“ Encantada también, Adri “ digo, cansada ya de pronunciar la palabra encantada cuando en realidad hablar con ellas me provoca de todo menos estar encantada.
2 comentarios:
Hola, soy Magenta, representante sociable de los bloggers muertos xDD
Me gusta tu historia, pero la protagonista no me cae muy bien....Es demasiado perfecta para mi gusto, pero de cualquier manera tengo ganas de verle para donde acaba todo xDD
Asi que si tienes un minuto, pasate por mi blog, y por el de los otros bloggers muertos, que seras bien recibida, cariño,
Fue un placer,
-Magen
Hola, pues la verdad la historia es una mezcla curiosas. Tiene partes que me recuerdan a Crespusculo, otras de las Cronicas Vampiricas, y una buena dosis de imaginación. Esta bastante bien, ánimo. Voy a por el siguiente capitulo ya te cuento
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