" Sentimientos Contradictorios " capítulo 13

¡Hola a tod@s! Siento haber desaparecido durante tanto tiempo, pero ahora estoy de vuelta para recuperar el tiempo perdido. Aquí os dejo el cortito capítulo 13, y espero que no tengais que esperar demasiado para el 14.

¡Espero que os guste, y os pido disculpas de nuevo!

Capítulo 13

Nos separamos lentamente, deseando que el momento que acabábamos de vivir no hubiese terminado. Nuestras miradas se encontraron, y todos los sentimientos que habíamos guardado con llave en nuestro corazón fueron transmitidos a través de ellas. Mis ojos, brillantes de felicidad y excitación, emitían ligeras ondas de incredulidad. Aún no podía creerme que Cole me amara. A mí. Una simple humana del montón que no tiene nada especial. A parte de padres vampiros, claro. Pero eso no cuenta. Había crecido como humana, y me sentía humana. Él me miró. Estaba sonriéndome. Podía leer mis pensamientos sin ningún tipo de problema, y le resultaba divertida mi alegría interior, aunque no era tan interior, porque él la sentía perfectamente. Suspiré, medio molesta porque aún en un momento tan sincero como aquél Cole siguiera invadiendo mi intimidad.

“ Lo siento. “ se limitó a decir.

Imaginé que la disculpa era porque también había oído la parte en la que me etiquetaba como molesta porque él estaba fisgoneando en mi cabeza.

“ No te disculpes por algo que no sientes. No está bien. “

“ Tienes razón. “ dijo riendo y mirándome.

Me cogió la mano y la besó. Un gesto tan dulce y simple hizo que los pelos de mi nuca se erizaran. Mi cuerpo rebozaba de amor por él. Sentía su enorme presencia en cada parte de mi ser. La sangre quemaba en mi interior. Era la primera vez en mi vida que me sentía tan dentro de una burbuja. Una burbuja que el mismo Cole explotó con sus lindas manos.

“ Eily. Tenemos que pensar una forma de salir de aquí. “

“ Si. Tienes razón. ¿Alguna idea? “

“ Aún no, pero déjame pensar. “

“¿Podemos volver al plan de antes, en el que yo me callo y tú piensas? Casi nos funciona. “

“ Me parece bien. “

“ Pero por favor, espero que tu nuevo plan no incluya nada sobre besar a Evan. No he comido nada desde hace un montón y no quiero vomitar lo poco que tengo en la tripa.”

“ A sus órdenes. “

Cole me estaba sonriendo. Me estaba mostrando su dulce sonrisa para darme ánimos. Me estaba ayudando a no darme por vencida en lo que correspondía a salir de aquella celda. Y lo consiguió. Me quedé callada y empezé a mirar a mí alrededor. No había ventanas, y la única puerta que veía estaba custodiada por uno de los seguidores de mi ex-tío Stewart. De pronto recordé a mis amigas. A todas. Las viejas amigas de toda la vida de Los Ángeles, con las que había compartido mi infancia y tantas otras cosas. Las nuevas que había hecho en Turlock, y que me habían abierto un poco los ojos acerca de quién eran Evan y Kyle en realidad. Aunque no había servido para mucho, ya que había caído en su trampa como una estúpida. Recordé mi primer día en el Turlock High School. No había pasado mucho tiempo desde éste, pero lo sentía muy lejano, como si fuera un recuerdo pasado que tienes muy borroso en la memoria y que no te esfuerzas a recordar porque es demasiado irrelevante. La verdad era que desde aquél día en el bosque con Evan todo había cambiado. Mi vida de chica normal y aburrida había terminado para dar paso a una vida alocada con vampiros de protagonistas. ¡Vampiros! Si alguien me hubiera dicho que me enamoraría de un vampiro dos meses atrás me hubiera reído de él en su propia cara. Primero porque no creía en vampiros, y segundo, porque si realmente existieran no se irían a enamorar de mí, precisamente. Recuerdo cómo estaba de sorprendida y confundida cuando Evan me contó sobre la existencia de los vampiros. Cuando me dijo que me iba a matar, y que no era nada personal. A partir de aquel día todo cambió. Todo mi pasado empezó a perder importancia. Tan solo importaba el presente. Sobrevivir un día más, empezar a descubrir cosas nuevas acerca de mí, fugarme de la mansión de mi salvador para caer en las garras del lobo. Sentirme traicionada por Cole. Enterarme de la verdad sobre mi tío Stew, alguien a quien consideraba digno de mi confianza y de mi amor. Saber la verdad acerca de mi pasado y de mis padres reales. Padres vampiros. Ser acosada por Evan. Tantas cosas habían pasado, y podía decir con seguridad que mi mente no estaba más abierta ni más lúcida que cuando me enteré de la existencia de los vampiros. Yo seguía siendo la misma chica asustadiza y patosa que dos semanas antes, solo que tenía la obligación de parecer fuerte y preparada para aceptar todo lo que me ofrecía el mundo con los brazos abiertos. No podía dar un paso atrás. Tenía que mostrarme siempre firme aunque estuviera totalmente asustada. Todo me parecía una gran locura, y a veces un mal sueño del que quería despertarme tan pronto como fuera posible. En mi interior sabía que era todo verdad y no podía hacer más que pedirle a dios que me ayudara. Si realmente existía, tenía que ayudarme. ¿No? Y ahora, allí estaba yo. Sentada en el suelo de una cárcel dentro de una mansión en medio de la nada. Era hasta irónico el vuelco que habían dado las cosas. Había escapado de Cole porque pensaba que él me engañaba con Silvye, y ahora estábamos atrapados juntos en una celda, y acabábamos de besarnos. Deseé con todas mis fuerzas salir de aquél sitio, reunirme con toda la gente que de verdad me amaba y en la que podía confiar. Y también con Cole, claro. Deseé poder volver a abrazar a mi dulce mamá, y volver a hablar con mi papá sobre la última película de su director favorito. Deseé volver a comer el pastel de chocolate relleno que hacía mi abuela por mis cumpleaños, y beber coca-cola light hasta hartarme. Deseé cotillear sobre chicos con Davi, Elein y Antje, y presentarles a Charlotte y a las otras. Deseé volver a besar a Cole y no dejarlo escapar nunca de mi lado. Todos estos deseos venían a mi mente al mismo tiempo, y no podía hacer nada más que desear con todas mis fuerzas que se hicieran realidad. Lo deseaba. Lo deseaba hasta tal extremo que una imagen empezó a formarse en mi cabeza. Una puerta. Una puerta transparente e imaginaria se estaba construyendo dentro de mi cabeza. Esperé unos minutos, sintiéndome estúpida por tener los ojos cerrados y esperar a que se terminara de construir una puerta que no estaba creando conscientemente dentro de mi mente. Cuando estuvo terminada, ( supe que estaba terminada porque cambió de color ) simplemente extendí el brazo y la abrí, pronunciando unas palabras muy simples.

“ Puerta. Ábrete y llévame con las personas que amo. Por favor. “

Oí un sonido, y abrí los ojos. Maravillada, pude observar como una puerta se había materializado enfrente mío, y me invitaba a entrar en ella. Cole me miraba, con los ojos fuera de sus órbitas, y, pensé, seguramente preguntándose qué había hecho para crear una puerta así de fácil. Me miró en silencio durante unos minutos, pero finalmente habló. Pero la pregunta que me hizo me confundió aún más de lo que ya estaba por el hecho inexplicable que acababa de realizar.

“¿Conoces la lengua de la magia? “

“ No, en absoluto. ¿Por? “

“ No por nada. Solo porque hace unos segundos has usado un hechizo vampírico que ni yo conozco. ¿Por qué me mentiste? Dijiste que no conocías nada sobre vampiros, que no te acordabas de nada. Y ahora, resulta que estás entrenada. Sabes hacer magia, Eily, y no me dijiste nada… “

Iba a seguir hablando y acusándome, pero le detuve.

“ ¿De qué estás hablando, Cole? No sé nada de magia y nunca he sido entrenada. Y tampoco entiendo nada sobre lo que me estás diciendo. Y además, no te he mentido. Siempre he sido sincera contigo, y tú lo sabes. ¿Por qué esta desconfianza, así, tan de repente? “

“ Entonces respóndeme, Eily. Si no sabes nada acerca de magia ni de hechizos vampíricos, ¿Por qué acabas de pronunciar las palabras – onneth lieyre kurekanlk yukeé resprictruimph liemeupqi skfir jeenq-? “

“ Yo no he dicho estas palabras. Nunca. En mi vida. “

“ Oh, ¿entonces vas a negarme que utilizaste este hechizo antiguo para abrir un portal? “

“ Si. Lo único que he hecho ha sido decir - Puerta. Ábrete y llévame con las personas que amo. Por favor.- “

“ Eres impresionante. “

“ ¿No me crees? “

Estaba empezando a hartarme de que Cole desconfiara de mí por una razón que no terminaba de entender, pero que me sonaba a estúpida.

“ Si. Te creo. Dios, claro que te creo. Te amo. ¿Cómo no voy a creerte? Siento haber desconfiado de ti, Eily. Pero estoy confundido por la puerta. Siento haberte dicho todo lo que te he dicho.“

“ No pasa nada.“

Era la primera vez que me decía aquellas dos palabras. Mi corazón dio un brinco de alegría. Realmente él me amaba. No era sólo mi imaginación. No era solo el beso. Me lo había dicho. Lo había confesado ante mí. Y yo estaba feliz. Porque pasara lo que pasara yo sabía que él me amaba, y estaría conmigo para siempre.

¡De verdad espero que os haya gustado!

besitoos,

Jade!